CaixaForum Zaragoza: un nuevo hito urbano

En la revista de julio, número 185, la arquitecto Carme Pinós y el asesor de estructuras y también arquitecto Robert Brufau nos desvelan en una entrevista con Virginia Oñate detalles del proyecto. También se muestran en exclusiva las fotografías de José Antonio Melendo del nuevo edificio

El viernes 27 de junio se inaugura el centro cultural CaixaForum de Zaragoza (en DESCUBRIR EL ARTE de JULIO se ha PUBLICADO un gran REPORTAJE y FOTOGRAFÍAS EN EXCLUSIVA). El visitante se encontrará con dos exposiciones temporales de arte contemporáneo y la posibilidad de recorrer un edificio de programa amplio (7.062 metros cuadrados) dispuesto a acoger conciertos, jornadas científicas, medioambientales…  Es un proyecto del estudio de arquitectura de Carme Pinós; una obra ambiciosa, atrevida desde el punto de vista de la estructura, que, con toda su contundencia, parece levitar sobre la urbe. En su interior, la arquitectura es también audaz y apuesta por una gran riqueza de planos, geometrías y materiales: hormigón, madera, cristal…

Se trata de un edificio de nueva planta, el único CaixaForum así ya que en el resto (Barcelona, Madrid, Lérida, Gerona, Tarragona y Palma de Mallorca) se optó por rehabilitaciones y readaptaciones de inmuebles emblemáticos de cada ciudad. Cuando la entidad convocó el concurso para adjudicar la obra estableció dos retos: el diseño de un edificio capaz de crear ciudad por su singularidad arquitectónica y su interacción con el espacio público y, por otro lado, que desde el interior el usuario pudiera disfrutar de grandes panorámicas de la ciudad al tiempo que de la introspección que requiere un espacio expositivo.

La arquitecto Carme Pinós y el asesor de estructura y también arquitecto Robert Brufau nos desvelan en una entrevista con Virginia Oñate en Descubrir el Arte 185 detalles del proyecto como que su planteamiento partía de crear un edificio-puerta con «dos grandes cuerpos geométricos suspendidos, de modo que la ciudad pasara bajo ellos», cuenta Pinós, o que, ahora habla Brufau, «la complejidad radicaba en que se proponía una obra que tenía un volumen con una envolvente sensiblemente cúbica y se pretendía que produjera una cierta sensación inicial de estar flotando en el solar. La presencia de grandes voladizos en todas las direcciones acentuaba esta percepción. Una concepción que desbordaba lo convencional en este tipo de intervenciones». Envuelto en chapa metálica perforada, el inmueble cuando llega la noche actúa como un faro sobre el parque junto al que se asienta, el nuevo Parque de El Portillo en la llamada Milla Digital. La impresión que queda es la de encontrarse ante una monumental escultura.

Las exposiciones con las que se inaugura el centro cultural son Planos sensibles (abierta hasta el 9 de septiembre), una selección de los grandes pintores y escultores españoles de la segunda mitad del siglo XX como Miquel Barceló, Antonio Saura, Millares o Tàpies, y Narrativas en la imagen (que clausura el 10 de agosto), centrada en soportes visuales como el vídeo o las tecnologías digitales para explorar nuevas vías de comunicación. Esta presenta obras de Samuel Becket (Not I), Alejandro Cesarco (The reader) o Javier Peñafiel (Maltrato).