Álvaro P-FF: la imagen de la música

El viernes 30 de octubre abre en la galería madrileña La Fiambrera la muestra «Do the mutilation (and other funny things to do on a friday night)» del artista Álvaro P-FF. Muy vinculado a la industria musical, ha buscado la compañía de una banda, la Tiki Twangers, para celebrar el día de la inauguración su primera exposición individual ex profeso

Situada en la calle Pez, la Fiambrera Art Gallery está especializada en diseño gráfico, ilustración y arte lowbrow. Aparte de organizar exposiciones, reserva un espacio para librería, tienda y café. El viernes 30 de octubre a las 7 de la tarde inaugura una nueva muestra: Do the mutilation (and other funny things to do on a friday night), dedicada al diseñador Álvaro P-FF (Madrid, 1973), que desde mediados de los años noventa pone imagen a la música en portadas y carteles (Calamaro, Bunbury o Los Corona son algunos ejemplos).

Esta muestra toma el nombre de una canción del grupo escocés The Revillos y enseña su faceta de artista plástico (es más conocido por su trabajo como gráfico) en un conjunto de obras muy personal realizado para la ocasión. Se presentan veintidós serigrafías trabajadas primero con un boceto manual a lápiz, que pasa a un proceso de trazado y composición digital y después al serigrafiado. De cada una de ellas hay 25 ejemplares. Álvaro P-FF, explorando una técnica y un formato hasta ahora inéditos en su trayectoria, ha realizado también para esta exposición dos cajas de luz para dos de sus obras.

Los motivos son aquello que le inspira: por ejemplo, H. G. Wells y la guerra de los mundos trasladada a Madrid o Nick Lowe en las barricadas con Nelson Mandela. Sus referentes son muy variados: la estética de las marcas de skate de finales de los ochenta, la cartelería americana de los noventa con artistas como Kozik o Almera, la imaginería mejicana, el humor negro, los tatuajes, el rock, el punk o el cartel político-propagandístico.
La inauguración tiene un aliciente más: junto al artista estará el grupo Tiki Twangers que, según cuentan ellos mismos en su web, tocan «clásicos de la música popular country elegante del siglo XX avistados desde el western swing añadiéndoles pinceladas de surf, rockabilly y blues, siempre con mucho fingerpickin». Sus conciertos instrumentales están ilustrados por Mauro Entrialgo. La exposición estará abierta hasta el 5 de diciembre.
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